Combatir la incontinencia urinaria con dispositivos mecánicos

Aunque puede ocurrir a cualquier edad, es más común en adultos mayores y en aquellas que han dado a luz, la incontinencia urinaria puede ocurrir de varias formas, incluida la incontinencia de esfuerzo (fugas cuando la vejiga está bajo presión) o incontinencia (fugas durante o poco después de una necesidad repentina de orinar).

La incontinencia urinaria puede afectar severamente la vida del paciente, afectar la calidad de vida y afectar significativamente las finanzas del mismo. Los procedimientos no quirúrgicos, como los ejercicios de los músculos del suelo pélvico y el uso de dispositivos mecánicos, suelen ser la primera línea de tratamiento, especialmente cuando, por ejemplo, una mujer no desea o no se considera apta para la cirugía.

Nombrados en honor a Arnold Kegel, el ginecólogo estadounidense que publicó por primera vez la técnica en 1948, los ejercicios de Kegel consisten en relajar y contraer los músculos del piso pélvico para fortalecerlos y pueden ayudar a muchas personas a mejorar el control muscular y la incontinencia urinaria. Pueden tardar varios meses en hacer efecto y es importante mencionar que deben realizarse correctamente para obtener resultados.

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Gracias a los avances de la medicina y los dispositivos mínimamente invasivos, se ha desarollado la leva, un dispositivo terapéutico que ayuda a las personas a fortalecer los músculos del suelo pélvico y a regular el tratamiento de la incontinencia urinaria. Este incluye un transductor vaginal y una aplicación combinada que brinda a los usuarios una visualización en tiempo real de cómo están ejercitando los músculos del piso pélvico.

La paciente inserta el transductor en la vagina durante el tratamiento de terapia muscular del suelo pélvico y conecta la aplicación al referente. Les enseña a relajarse, descansar y respirar profundamente, luego aprietan la vagina y la sostienen durante quince segundos, que pueden ver en el dispositivo. Lo hacen dos veces, cinco veces al día. Entonces, durante dos minutos y medio dos veces al día, puede restaurar la salud del piso pélvico.
Un mecanismo de leva evalúa los movimientos de Kegel del usuario utilizando seis acelerómetros internos. Durante los ejercicios del suelo pélvico, los músculos circundantes elevan la vagina y la vagina izquierda utiliza seis sensores para medir la pendiente de la elevación. Los usuarios pueden ver cambios de gradiente en tiempo real en la pantalla, lo que les permite evaluar objetivamente su progreso a medida que continúan usando el dispositivo.

Aunque actualmente se usa una gran cantidad de dispositivos mecánicos para tratar la incontinencia urinaria, su uso puede ser mejor que ningún tratamiento, pero la evidencia es débil. Los ejercicios de Kegel controlados ayudarán a acelerar el fortalecimiento muscular, mejorando así la calidad de vida del paciente.