La resistencia antimicrobiana (RAM por sus siglas) es un fenómeno causado por las mutaciones en microorganismos como bacterias, hongos y virus que los hacen resistentes a los antibióticos, antifúngicos y anti virales.
La habilidad que adquieren ciertos microorganismos para evitar que los medicamentos con los que usualmente son combatidos sean eficaces en el tratamiento de las infecciones se han convertido en una preocupación mundial.
De no reducirse el avance de la RAM algunos expertos consideran que en las próximas décadas sus efectos podrían ser más devastadores que los causados por el coronavirus. Las proyecciones sugieren que la RAM podría provocar millones de muertes, superando las causadas por el cáncer y la diabetes, además de un gasto desmesurado en salud para finales de esta década. De allí que la Organización Mundial de la Salud (OMS por sus siglas) considere la resistencia antimicrobiana como una de las 10 principales amenazas de salud pública a nivel mundial.
Impacto actual de la resistencia antimicrobiana
En la Semana Global de la Lucha Contra la Resistencia Antimicrobiana, considerada una "pandemia silenciosa" que no solo amenaza el tratamiento de enfermedades comunes como infecciones urinarias o infecciones respiratorias agudas, sino también la sostenibilidad de los sistemas de salud.
Además, estos microorganismos resistentes pueden estar en las personas, los animales, los vegetales y transmitirse entre sí; por ejemplo: el consumo de carne animal, en caso de estar infectada, podría transmitir bacterias resistentes a los seres humanos, representando un desafío para la contención de su propagación y la atención clínica.
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A medida que los microbios se vuelven más resistentes a los medicamentos utilizados para su tratamiento, algunos de los procedimientos médicos más comunes como por ejemplo las cirugías, aumentan los riesgos de posibles infecciones asociadas al tratamiento.
El aumento en el impacto de enfermedades infecciosas ya se evidenció en 2020 cuando estas pasaron de ser la sexta causa de mortalidad en Colombia, a ser la segunda con alrededor de 73.000 casos atribuibles –tener en cuenta el efecto de COVID-19-, siendo superada únicamente por enfermedades del sistema circulatorio con cerca de 81.000 casos.
¿Qué se está haciendo para combatir la resistencia antimicrobiana?
Colombia lidera de la mano de otros países de la región la lucha contra la resistencia antimicrobiana y mantiene su alineación al proyecto Trabajando juntos para combatir la resistencia a los antimicrobianos de la Organización Panamericana de la Salud. En paralelo, el sector de dispositivos médicos y tecnologías han fortalecido el motor indispensable para mitigar efectivamente la RAM.
Desde BD, compañía líder en tecnología médica, vemos como una prioridad que el marco político del país abra caminos que modifiquen el curso de la gestión antibiótica y diagnóstica desde el nivel prestacional; de tal manera que, se delimiten rutas efectivas conducentes a la moderación de la RAM.
La OMS ha asegurado que enfrentamos una pandemia silenciosa derivada de un problema de salud pública que va en aumento, y a la que se asocian 1,27 millones de muertes al año. En este sentido, es clave tomar conciencia sobre este tema y seguir el llamado de la OMS a trabajar en equipo. Según la entidad, detener y revertir los procesos de RAM, es un desafío de grandes proporciones que requiere la articulación de recursos y esfuerzos tanto del sector público como del privado, a través de un esfuerzo colectivo y un plan común.
La responsabilidad de la contención y control de la RAM tiene tareas desde todos los sectores, de allí que, sean necesarios para discutir la agenda pública y encaminar acciones inmediatas pues el futuro dependerá, en gran medida, de nuestro proceder hoy.
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