La atención del ACV, un riesgo por mitigar

Con el ACV posicionándose como la segunda causa de muerte a nivel mundial, la importancia de un diagnóstico rápido y el acceso a tratamientos avanzados son fundamentales para mejorar las intervenciones y expandir la cobertura sanitaria, facilitando así una mejor calidad de vida para los afectados.

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Por: Fabián Rodríguez, director del Negocio de Diagnóstico por Imágenes y Terapias Avanzadas de Siemens Healthineers Colombia, Perú y Ecuador

Los trastornos neurológicos comprenden una amplia variedad de condiciones, desde infecciones y tumores hasta trastornos degenerativos. Entre ellos está el accidente cerebrovascular (ACV), conocido como ictus cerebral, que se produce cuando el flujo sanguíneo hacia una parte del cerebro se reduce o interrumpe, causando daño irreversible por falta de oxígeno y nutrientes. Esta condición afecta gravemente tanto el sistema nervioso central como el periférico.

Es crucial comprender la importancia de una respuesta rápida y el uso adecuado de la tecnología en casos de ACV, ya que el tiempo es clave para prevenir la muerte y las secuelas permanentes. Dado que estos incidentes son la segunda causa de muerte a nivel mundial, resulta imprescindible mejorar las intervenciones, reforzar la prevención y ampliar el acceso a la salud para beneficiar a más personas.

La alta probabilidad de riesgo y la cantidad significativa de casos recalcan la importancia de prestar atención y crear conciencia sobre esta condición. Cuando aparecen los síntomas del ACV, comienza una carrera contra el tiempo para salvar a la persona y reducir la gravedad de las secuelas. Estos síntomas incluyen pérdida súbita de fuerza o sensibilidad en el rostro, brazo o pierna, especialmente en un lado del cuerpo, así como confusión repentina y dificultad para hablar. Estos signos requieren atención médica urgente, ya que reconocerlos a tiempo y actuar rápidamente puede reducir el daño cerebral y mejorar las posibilidades de recuperación sin secuelas permanentes.

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Proporcionar herramientas de diagnóstico y tratamiento adecuadas es fundamental en la atención médica de emergencias. Desde su inicio, hasta las fases de diagnóstico, cuidado y recuperación, es crucial optimizar los procesos médicos. Lo anterior requiere el desarrollo e innovación de tecnologías que no solo salven vidas y reduzcan el impacto de un ACV, sino que también ayuden a los pacientes a superar desafíos significativos como discapacidades físicas, alteraciones cognitivas y emocionales, problemas de comunicación, y la pérdida de empleo, ingresos y relaciones sociales.

Aunque buscamos mejorar constantemente nuestros procesos, técnicas y equipos en el sector de la salud, aún enfrentamos desafíos considerables en términos de tiempos de atención y acceso a la atención médica, factores que influyen en el resultado y la evolución médica de los pacientes afectados. 

Actualmente, hay zonas de la región que carecen de atención médica cercana y algunas instituciones no disponen de los equipos necesarios para diagnosticar y tratar un ACV correctamente. 

Aumentar la cobertura con los equipos y el personal adecuado podría reducir considerablemente la mortalidad y las discapacidades causadas por esta emergencia. Desde el inicio de un derrame cerebral, cada minuto cuenta, desde el traslado a un centro médico hasta el tratamiento oportuno.